Son las 7 de la mañana
y el sol llama en nuestras tiendas, nos despertamos con el calor dándonos la
bienvenida y recordándonos que estamos en Marruecos. Empezamos a montar las
motos motivados porque hoy será el mejor día ya que visitamos las Gorges du
Dades y haremos parte del atlas, carretera de curvas reviradas.
A las 8 y poco
arrancamos y nos despedimos de un grupo de gente catalanes que habíamos conocido
(casualidades de la vida).
Después de unos
30 Km llegamos a las Gorges Du Dades, carretera impresionante, ya estábamos un
poco cansados de hacer carreteras rectas y rectas que mirabas al horizonte y
parecía que no se acababa, hoy era el día que nos lo pasaríamos genial! Después
de hacer un sube y baja por la carretera decidimos ir a comer a Ouarzazate.
Carretera recta donde las haya y encima con viento, el
viento se te colaba por la espalda y te quemaba estaba ardiendo. Encontramos un sitio en la carretera
principal y decidimos parar a comer, después de comer decidimos tomarnos
nuestro primer Te en marruecos.
Ahora sí que sí,
estamos listos. Enfilamos la carretera dirección Ait-Ben Haddou, pueblo
declarado patrimonio de la humanidad por la Unesco. Es famoso porque es un
Ksar, es decir una ciudad fortificada, y además se han rodado varias películas
como Gladiator, La momia o Alejandro Magno entre otras… Unas vistas
espectaculares, la carretera bordeaba un río, carreteras espectacular con
curvas reviradas, la gente nos miraba creo que pasan pocas motos por allí.
Decidimos seguir la carretera y llegar un poco al atlas, pero no sabíamos que
nos haría tarde. La carretera al final estaba sin asfaltar con piedras y mucho
polvo la GS estaba sufriendo por los baches, encima en el punto más alto nos
empieza a llover y vemos que el sol se está escondiendo detrás de la montaña, teníamos que llegar a
Marrakech sí o sí.
Una vez terminada la carretera de montaña nos encontramos el
puerto de montaña del atlas, Col Du Tichka, carretera llena de camiones, y de gente vendiendo souvenirs. Casi no había sol así que paramos y decidimos que hacer. Son las 19:45 el sol se está yendo, paramos en un camino para acampar ya estábamos decididos pero cual fue nuestra sorpresa!? No teníamos agua, cosa indispensable para Marruecos ya que constantemente te tienes que hidratar y también para poder cocinar los fideos deshidratados. Total seguimos la carretera y nos encontramos un bar en obras con gente. Empezamos a hablar con un señor que parecía cazador ya que llevaba típico pantalones y chaleco militar y cartuchos de escopeta en la cintura, le preguntamos qué tal se dormía allí arriba (camino donde teníamos pensado dormir) y nos contesta que es muy peligroso, que hay muchos animales salvajes, estábamos flipando y a la vez un poco asustados, ya que a Marrakech no llegamos con la luz y lo primero que te advierten en Marruecos es de no conducir de noche y menos con motos. Total que nos ofrecen dormir en la terraza del bar gratis. (Luego le dimos 50 dírhams, 5€ por las molestias). Cenamos y nos disponemos a dormir o a intentarlo porque fue imposible, las luces de los camiones te iluminaban toda la tienda y parecía que se te echaban encima. A media noche eso que estas medio dormido pero a la mínima te despiertas, escuchamos un aullido lejos, nos preguntamos si lo habíamos escuchado, respondemos los dos que sí, empieza lo bueno…. Al cabo de un minuto escuchamos 2 aullidos cada vez más cerca, 1 minutos más y escuchamos una manada de aullidos al lado de las tiendas, parecía que estaban en la carretera, en las tiendas ya y empiezan a correr colina abajo (por suerte). Luego a las tantas de la noche escuchamos ruidos justo al lado de las tiendas, creemos que era un cerdo. ¡Qué noche!. Intentamos dormir todo lo que pudiéramos (fue difícil) e intentar descansar para el día siguiente que tocaba Marrakech!
Sin lugar a dudas a pesar de lo último, el mejor día del viaje a Marruecos! 
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